Digitalización del sector retail
15/06/2020¿Cuál es el futuro de la logística?
20/07/2020Las economías a lo largo del mundo han ido dependiendo, desde hace mucho tiempo, de sus exportaciones para sostenerse. Eso aumenta en el caso de América Latina, que sigue siendo la mayor región exportadora de commodities, materias primas y alimentos en el mundo. Pese a eso, la crisis del coronavirus ha llevado y se cree que llevará a una caída sustancial en la venta de productos de cara a los mercados exteriores. Se cree que eso será peor en el segundo trimestre del año 2020.
Por un lado, esto puede parecer una contradicción. Las naciones están hoy insertas en un mundo cada vez más globalizado donde la comercialización entre países resulta sencilla. Pero la crisis económica internacional, la caída de las economías china y estadounidense y las medidas de restricción de movilidad para evitar los contagios de covid-19 impactan sobre las posibilidades del comercio internacional. Ciertamente, esto no sucederá de la misma manera en todos los sectores, pero sí se espera una fuerte reducción.
Short sea shipping
Como consecuencia de lo mencionado con anterioridad, algunos especialistas apuntan a otro fenómeno que también podría llegar a ocasionarse. Este podría tener un poderoso impacto sobre el transporte marítimo de materiales y de mercancías. Estamos haciendo referencia al short sea shipping. Se estima que luego de la pandemia del coronavirus se puede ocasionar un aumento de los tráficos de transporte marítimo de corta distancia, bajando los transportes largos, especialmente con dirección o desde Asia. En caso de que la emergencia del covid-19 sea breve, se espera también que los tráficos marítimos anteriores a la pandemia se puedan recuperar hacia 2022.
Lo que se conoce como short sea shipping, hace referencia a la unión marítima de todos los puertos situados en zonas que pertenecen al territorio de la Unión Europea (UE). Se incluyen también aquellos puertos que están en otros países que no conforman la Unión Europea, pero que sí limitan con el territorio europeo. Se considera que se lo podrá empezar a pensar como un nuevo tipo de transporte marítimo internacional. Su principal objetivo tiene que ver con ofrecer un transporte de mercancías y de pasajeros que sea eficiente. Hay sectores que lo consideran como una buena alternativa a los medios de transporte nacionales, aunque sí hay una fuerte oposición a esta idea.
Visión a futuro
Teniendo en cuenta todo lo mencionado con anterioridad, la logística de última milla, en un escenario como el que se transita a nivel internacional hoy en día, adquirirá mayor importancia. Ello, considerando también la robotización sofisticada en las operaciones tanto de obtención como de entrega y en los transportes internacionales tanto de corta como de media distancia. Se considera que las empresas deberán estar preparadas para poder asumir los retos que supondrá el incremento de estas operaciones ligadas al comercio electrónico que no para de crecer con el paso del tiempo.